2007-04-22

la mujer que yo quiero existe

esta hecha de piel

de huesos,

de silencio

y de mirada inverosímil...



tiene voz tenue

y pareciera que reposa al costado de un lago imaginario


y yo que no creo en inalcanzables, ni me conformo

solo me queda aguardar

al compás de mi corazón-fragua de náufrago y poeta


solo me queda eludir el fracaso que me circunda...

solo me queda el ejercicio de la invocación radical
de la palabra hecha flecha dulce

del símbolo que abre espacios y continentes

solo que queda decir...
que soy siempre más de lo que aparento...

y que mis manos me aseguran conocer el lenguaje de tu piel...

1 comentario:

Kaiserin dijo...

Qué bellos textos has publicado aquí.

Saludos...


Seguiré pasando...